30 de abril de 2010

Viaje a ninguna parte

Resultaba difícil volver una esquina y no maravillarse de aquellas vistas, entre calles silenciosas y ruidosos bazares, entre lluvia intensa y momentos de calor asfixiante nos observaban montañas milenarias, esculpidas por el capricho de los años...el holor era afrutado, tranquilo....











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