26 de mayo de 2014

Big Bad Wolves

Extraño thriller policiaco con tintes de comedia el que se han marcado un par de directores israelitas y que viene precedido por cierta aura de peli "tapada" gracias a algunas recomendaciones de gurus del cine como Quentin Tarantino y de buenas críticas en general.

Aharon Keshales y Navot Papushado se marcan una historia en la que un detective, con una manera de trabajar poco ortodoxa, fija sus pesquisas sobre un brutal asesinato en un pobre desgraciado que tiene pinta de todo menos de asesino en serie..


Algo funciona desde el primer minuto en Big Bad Wolves, tiene madera de producción cuidada, de mimo en la fotografía, en el sonido, de saber aguantar el pulso de forma magnífica, de saber introducir ese elemento que descoloca, que añade tensión...es un camino extraño que consigue enganchar al espectador gracias, entre otras cosas, a la siempre tensión que provoca el no saber quién es realmente aquí la encarnación del mal y quién la del bien, si es que se puede decir que existen dichos roles.

Precisamente en ese juego de roles es donde por momentos me ha resultado algo inconexa emocionalmente Big Bad.
Si bien en general la historia está bien formada, los personajes funcionan y tienen la suficiente profundidad, sí que es cierto que en ocasiones parecen alejarse de esa frescura que caracteriza los primeros momentos, de resultar algo incoherentes con su discurso y quizás incluso por ello les falte algo más de garra para cruzar el límite definitivamente...reduciéndolo todo peligrosamente en algunos pasajes a algo incluso predecible.

Pero por fortuna, estos instantes son bastante fugaces y en general la cinta remonta el vuelo con algún gag o situación bien hilada, o con algún personaje que hace su entrada y añade picante al asunto, sin olvidar las escenas de brutalidad física, que muestran lo justo con elegancia.

Big Bad Wolves es un entretenimiento muy recomendable y que pone en el punto de mira a este par de directores, cuyos futuros trabajos pueden llegar a ser muy interesantes.

Un saludo.

19 de mayo de 2014

The Incredible Shrinking Man

El increíble hombre menguante narra la historia de Scott Carey, quien un buen día disfrutando de un viaje en barco junto a su mujer, se ve envuelto por una extraña niebla que le provocará una extraña mutación que le hará menguar en cuanto a estatura.


Sin duda analizando el argumento desde nuestros días, la cinta se hubiera pegado un batacazo considerable y probablemente no hablaríamos de peli de culto a estas alturas, pero para analizar el trabajo de Jack Arnold no queda otra que situarse en aquella década, en lo osado y ambiciosa de su propuesta dado el declive de las cintas denominadas de serie B, que sirvieron, entre otras cosas, tanto para alimentar las mentes de algunos directores que posteriormente crearon obras maestras del género como para dar rienda suelta a verdaderas abominaciones.

Estrenada en 1957, la cinta es todo un clásico de la ciencia ficción, no solo por su sólida historia y sus llamativos recursos visuales teniendo en cuenta la época en la que fue creada, sino porque resulta todo un ejercicio de solidez narrativa y ritmo, siendo su segunda mitad toda una masterclass cinematográfica que te mantiene pegado a la pantalla sin escapatoria alguna, con unos momentos de pura aventura que a más de una cinta actual le gustaría alcanzar, en una época en la que suelen tener más peso los efectos especiales que el contexto en el que son utilizados.


Para redondear un producto tremendamente entretenido, tiene un cierre algo kafkiano en el que se funden cuestiones filosóficas inherentes al ser humano, en una interesante reflexión en la que tiene cabida desde la más pequeña de las partículas hasta el mismo universo, como si fuésemos partícipes de la revelación de uno de los muchos secretos que guarda el propio cosmos.

Puede que a algunos les resulte extraño, pero sin duda es un cierre magnífico ante tan insólita situación.

Pros: Es un viaje cautivador, lleno de fantásticos recursos audiovisuales y con un ritmo, sobre todo en su segunda mitad, brutal.
Contras: Algunas situaciones pecan de ingenuas, pero la cinta avanza tan bien que se perdonan.

Un saludo.

12 de mayo de 2014

Blue Jasmine

Cate Blanchett protagoniza este nuevo drama con tintes de comedia del prolífico Woody Allen, en un nuevo acercamiento a esos personajes en extremo matizados sin olvidar la diversión y ese punto de crítica social.

Jasmine es una adinerada casada con un pez gordo de las finanzas que acaba en bancarrota, teniendo que ir a vivir a San Francisco con su hermana choni.

A estas alturas de la película imagino que casi todo Dios sabrá del galardón de la Blanchett en la pasada ceremónia de los Óscar, y viendo la cinta no cabe otra que dar la razón al jurado pues la tipa literalmente se come la pantalla cada vez que aparece, con un personaje lleno de matices, de sentimiento, de expresividad tanto gestual como emocional. Una montaña rusa agotadora por momentos, afilada y que atraviesa en más de una ocasión la pantalla para clavar esa mirada llena de odio, de rencor e incluso de amor.


Blue Jasmine no es solo Blanchett, no funcionaría sin ese personaje afincado en San Francisco pero con acento sureño que es su hermana Ginger, interpretada por una magnífica Sally Hawkins y que representa esa influenciable clase social que puede ser llevada a su propia destrucción cuando entra en contacto con personajes como Jasmine. Dejando por el camino momentos de carcajada y dando ese toque enternecedor por momentos.

Quizás redunda demasiado en su idea original, entre otras cosas porque los flashbacks nos van dando detalles del qporqué del estado emocional de Jasmine y no dejan avanzar la historia con suficiente velocidad. Esto, unido a que quizás le falta algo de más mala leche o de presentar situaciones algo más rocambolescas que los simples líos de faldas, hagan que la valoración no sea de asombro, pero en cualquier caso, es una estupenda cinta, con un muy buen ritmo y con Jasmine, que por sí sola ya merece su visionado y alabanza.

Pros: La Blanchett.
Contras: Igual en su afán por no presentar algo pasado de vueltas a nivel histriónico o viendo que su protagonista ya había tocado techo en esta historia, Allen no arriesga demasiado en cuanto a mala leche.

Un saludo.

6 de mayo de 2014

Robocop (2014)

Remake o reboot como le llaman ahora a los refritos que Hollywood se marca de cintas clásicas, en un nuevo intento por resucitar una franquicia que colea en el subconsciente colectivo de cierta generación.
Quién no alucinaba con esa brutalidad, esas escenas de acción, ese gore que Verhoeven mostró de una forma muy personal que quedó grabada en la mente del público? No es de extrañar pues, que la sombra del clásico sea tan alargada.


Pero de nuevo yo me encuentro con una cinta entretenida, como ya me pasó recientemente con el reinicio de Spiderman, cinta que desató las iras de los seguidores más fieles al cómic (oh Dios mío, es que los ojos de Spidy en el cómic son almendrados!) y a las cintas de Raimi pero que a mí personalmente no me molestó en absoluto porque en esencia no deja de ser otro punto de vista sobre el mismo héroe y que, una vez pasado el "parto" de su creación, no deja de ser una nueva aventura..
Estamos de acuerdo en la finalidad de los estudios a la hora de sacar estos productos, pero también está ese componente entre el tributo a la obra original y el darle un lavado de cara con la tecnología actual. 

Así se presenta esta Robocop, cuya premisa es muy parecida a su original, es decir, poli que sufre una encerrona y que es aprovechado por una multinacional sin escrúpulos para crear el mega-poli del futuro, todo ello envuelto en una crítica social sobre quién vigila a los vigilantes, la moralidad, la tecnología aplicada a la vida humana...todo un batiburrillo interesante, tocado en infinidad de ocasiones, pero que Robocop se plantea con cierta sorna, con extrema violencia y con unos acordes musicales que por desgracia suenan muy poco en este remake/reboot.


Sigue siendo un entretenimiento ingenuo, directo, pero no carente de fallos, con un final muy muy flojo, apenas sin fuerza y que no aprovecha la herencia épica de la que podía haberse nutrido, ya no solo por su predecesora como digo, sino porque hasta entonces no lo había hecho del todo mal en cuanto a la construcción del personaje y ritmo, con lo que queda cierta sensación de oportunidad perdida.

Pros: Funciona como entretenimiento. Las escenas de acción están bien rodadas.
Contras: El final es muy flojo....y utiliza muy poco la sinfonía original!

Un saludo.