18 de mayo de 2016

Capitán América: Civil War

Decía Platón que "La justicia no es otra cosa que la conveniencia del más fuerte", y esto, a grandes rasgos, podría ser la base argumental de esta nueva entrega del universo Marvel, en la que el Capitán América es la excusa para continuar la estela dejada por los Vengadores y el resto de personajes que se han ido añadiendo al plantel inicial.


Lo titánico del asunto es conseguir que el espectador disfrute de una historia razonablemente llevadera, mantener cierta coherencia con el resto de franquicias y evolucionar en cuanto a espectacularidad. Porque la legión de fans ya está asegurada y la captación de nuevos reclutas puede llegar en cualquier momento, ya sea, por poner un par de ejemplos, por descubrir un personaje interesante entre todos los existentes o bien por saber cómo evolucionan las distintas sagas.

A veces imagino, cuando estoy viendo una nueva entrega, cómo reaccionará el espectador que no tenga ni pajorela idea de lo que ha pasado en...digamos...las 3 cintas anteriores a la que nos ocupa.
De hecho, en ocasiones aparecen pequeñas referencias a objetos o sucesos que están por venir o que han aparecido de forma fugaz y que tienen cierta relevancia, pero a las que no se les presta suficiente atención porque es un injerto más en pantalla en ese frenético universo, algo que seguramente conecte un pasaje con otro, pero en ocasiones dicha conexión no llega, y todo queda relegado a un comentario, una imagen, una gema brillante, de los que sólo unos pocos disfrutan, el resto queda relegado a cierto ostracismo o sencillamente a pasar del asunto en espera de las hostias.
Esas pequeñas referencias desconocidas cobrará importancia cuando a Marvel Studios le venga en gana continuar con esa fase, pues de camino puede perfectamente alargar las franquicias con aventurillas varias.
Esto, si bien puede ser una estrategia interesante para enganchar a cierto público, resulta también un arma de doble filo que provoque, de forma cada vez más notoria, pereza a la hora de subirse al carro de toda esta vorágine de nombres y tramas.


Tras los acontecimientos de los Vengadores 1 y 2, Ironmanes, Thores, Antman y Capitanes América, el trabajo de estos seres tan "especiales" se pone en tela de juicio debido a la destrucción que dejan tras de sí en sus actuaciones.

Esta premisa era de esperar de cara a añadir ese toque actual y humanizado donde cualquier acto, por increíble que sea, siempre tendrá sus consecuencias, en una sociedad mucho más analítica que en la época de los primeros cómics, donde esos detalles quedaban más diluidos.
Sorpresivamente, y tras algunos movimientos de DC, la gran "rival" de Marvel en cuanto a este tipo de cine, parece que las creaciones de Stan Lee quieren acercarse tímidamente, y con el aval de tener ya muy bien asentadas las distintas franquicias que tejen este aparentemente complejo universo, a esa humanización de sus protagonistas. 
Si bien Marvel utiliza un tono más infantil y continuista en su estructura, sin olvidar al villano de turno que funciona como cortina de humo para justificar las hostias, es de recibo destacar que gestiona de forma correcta sus productos para presentar algo decente pero, no hay que engañarse, muy inocente en la mayoría de ocasiones, y en las antípodas de ser rompedor o llamativo en un ámbito que queda lejos de tomarse en serio como parece pretender en ocasiones, dentro de lo que cabe.
Porque si nos centramos en qué representa Civil War como película, todo se reduce a una venganza despechada, donde seres aparentemente invencibles se cuestionan entre sí sin creérselo ni ellos mismos, para acabar como siempre, dando tortas.
En la sombra tenemos un gobierno que ahora está y ahora no y que añade ese personaje indirecto que demanda comprensión por parte de esos seres capaces de destruir ciudades enteras, en un claro ejemplo de controlar las conveniencias de los más fuertes con la justicia por bandera. Un Stark casi bipolar, unos seres invencibles (Visión, Hulk, Thor, etc.) que ahora conviene que salgan y ahora no....así cuesta mucho centrarse para el que busque algo más sólido y cierta profundidad de calidad.


Pero la función es entretenida, la intención yo creo que es buena, Brühl lo hace medio bien salvo por cuando le da por hacer el ganso rodando como una croqueta en el suelo entre gemidos para "despistar" a los héroes mientras el otro aparece por detrás para atizar. Cosas, detalles...por no hablar de la impunidad con la que se mueve como Pedro por su casa...pero es algo que ya hemos visto en otras cintas de este tipo...que el ritmo no pare...es mejor no pensar demasiado en que por ahí andan los X-Men, Hulk y demás...
Los efectos especiales son muy buenos, la fotografía es correcta pero no destaca en prácticamente nada, la épica brilla por su ausencia salvo en dos o tres ocasiones, destacando un Spiderman muy divertido...y en general, comparto alguna opinión en la que se indica que lo de Civil War le queda algo grande. Como título, con Capitán América....3, hubiera sido suficiente. 
Eso sí, para mí es mejor que las 2 primeras, donde se iba de serio sin sustancia, con tramas aburridas, enrevesadas únicamente para desviar la atención de planes absurdos y reiterativos.
Aquí falla también en la resolución del conflicto aparentemente principal (yo no he diseñado ese cartel de confrontación, a mí no me miren), porque nadie cree en él, y porque la trama final tiene cierta chispa pero resulta débil si la analizamos con perspectiva, pero la intención, como digo, es buena.

Tras este receso, ni idea de por dónde irán los tiros, imagino que seguirá la vertiente más humorística y familiar, mezclado con grandes (ojalá que no sea únicamente por el tamaño) enemigos y retos.
Yo casi prefiero que Marvel se centre en ello, y deje la parte oscura y humana a DC, aunque si el resultado es bueno, por mí como si se mezclan los dos universos. En cualquier caso, es bueno que haya competencia, que se piquen y que se expriman los cerebros para regalarnos esa aventura definitiva que está por llegar.

Un saludo.


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