13 de agosto de 2010

Kyoto

Kyoto

A eso de las 9 bajamos para dejar la llave del hotel y largarnos hacia la parada de Tokyo en donde pillaríamos un Shinkansen hasta Kyoto.

El hotel de Tokyo es un zulillo, pero como mínimo está limpio y bueno, está en una zona bien comunicada, a pesar de que nos comemos siempre unas paradas de metro hasta pillar la línea de la Japan Rail, que es la que tenemos gratis...en fin, por los 200 y pico euros por 5 noches tampoco vamos a pedir maravillas.

Llegamos a la parada de Tokyo y nos dirigimos hacia la zona de los trenes rápidos para sacar los billetes, la zona estaba a petar, como siempre y en casi todas las grandes paradas de esta mega-urbe. Una vez allí le pedimos dos billetes para Kyoto y nos comentó que si queríamos asientos reservados teníamos que esperar hasta las 14h...ni de coña, así que no pillamos billetes y simplemente nos fuimos hacia el andén 16 (tal y como nos había indicado) para subirnos en un tren de asientos “non-reserved” o lo que es lo mismo “tonto el último”.
En el andén hay que fijarse en unas marcas en el suelo en el que se indica dónde posicionarse para entrar al vagón que a su vez está indicado en una pantalla, vagón 1, 2, 3 (el de fumadores), 4, etc.
Nos pusimos en el 4 (los 5 primeros eran para los non-reserved) y vimos que eramos de los primeros...no teníamos muy claro si íbamos a pillar sitio pero de los primeros entraríamos, así que por intentarlo...
Llegó el tren y se bajó una marabunta de gente y luego tocó esperar mientras empleados del tren le daban la vuelta a los asientos. Si, como ahora el tren va hacia el otro lado, pulsan una palanca en el suelo y giran los asientos para orientarlos hacia la dirección en la que se viaja, madre de Dios...y encima los limpian uno a uno, madre de Dios x 2.

Por si acaso (y para no cometer la capullada de Nikko) le preguntamos a un buen hombre si ese era el tren de Kyoto a lo que nos contestó que sí. Cabe destacar que la gente de Tokyo nos ha ayudado muchísimo, son súper serviciales y, a pesar de parecer gente muy estirada y hermética, nos hemos encontrado con unas personas a las que si le preguntas cualquier cosa se desviven (literalmente) por ayudarte...desespera en ocasiones el ser tan (pero tan tan) correcto, ya que uno no está acostumbrado a que le den el cambio con las dos manos, le hagan una reverencia, le deseen que tenga un buen día, que vuelva...qué se yo...

Llegó la hora de entrar al tren y pillamos asientos sin problemas. Ya no los dejaríamos hasta llegar a Kyoto por lo que el tema de reservar billetes quedó solventado...de todas formas mejor no arriesgar y en los próximos igual nos acercamos a la estación con antelación para reservar.

El viaje fue comodísimo, el espacio entre el asiento que tienes delante y el tuyo es muy generoso, por lo que puedes estirar las piernas sin problemas. Lástima de la lluvia, que no nos dejó ver el monte Fuji desde el tren...intentaremos verlo para la vuelta.
De todas formas, vimos paisajes muy chulos de arrozales, casitas, montañas...además, las nubes estaban tan bajas que a veces casi se juntaba con la niebla del suelo, lo que le formaba un paisaje precioso.

Llegamos a eso de las 13h a la mega estación de Kyoto, un complejo enorme en el que decidimos comer ya que la guía recomendaba los restaurantes de la parte superior...y como no conocemos mucho la zona preferimos comer algo seguro.

Subimos a la planta superior (una barbaridad de pisos) y nos metimos en un chino ya que los otros sitios estaban a petar (hacen cola en la entrada del garito y te van llamando)...los platos eran muy parecidos al Ni Hao de Sanvi, así que más o menos lo tuvimos claro...cerdo a la vinagreta con verduras y pollo crujiente con soja, cervecitas y adiós muy buenas...todo correcto y por 3000 y pico yens.

Seguimos las indicaciones que Jordi nos había pasado en un mail para llegar al hotel pero como las calles son más largas que un día sin pan giramos por donde no tocaba y nos pasamos unos 100 o 200 metros del sitio del hotel...bueno, preguntamos a unos lugareños y muy amablemente nos indicaron de muerte el lugar...qué majos son los jodíos en serio, muy majos.

Llegamos al ryokan....el sitio es acojonantemente bonito. La entrada principal es de madera (como la mayoría) y da paso a una recepción toda empedrada en el suelo, con jardines al fondo y unas mesas enormes de madera con tocones para sentarse...se estaba fresquito y una señorita nos trajo té fresco y nos hizo el checking, de mientras, le preguntamos sobre el sistema de transporte, los horarios, etc y nos lo explicó muy amablemente dándonos mapas e información.
La luz tenue, lo ordenadito que estaba todo y limpio...bueno bueno, de lujo.
Como no había sitio cuando reservamos, tenemos que cambiar de habitación uno de los días, pero vamos, sin problemas.
Nos enseñó el lugar y luego nos dejó en la habitación...nos va a costar horrores dejar un sitio así...madre mía qué camas....5 días durmiendo en un tronco...casi lloramos.

Sintiéndolo en el alma tuvimos que largarnos para visitar la zona de Gion y dar un garbeo por la zona, así que nos fuimos hacia la parada de bus que nos había indicado la chica del hotel, Nishi Honganji Mae, desde donde teníamos que ir a Shijo Horikawa y andar un poco hasta Shijo Nishinotoin para coger otro bus hasta Gion.
El sistema de buses parece algo complejo, pero una vez que estudias el galimatías de líneas, colores y números se entiende más o menos...ahora sólo queda afinar la vista y el oído para que no te pases de estación y tengas que esperar o pillar otra combinación de buses para llegar a algún sitio.

En la parada del bus conocimos a un canadiense muy salada que estuvo charlando con nosotros un rato, hasta que llegó el bus. Nos fuimos a meter por la puerta del conductor y el chaval nos dijo que se entraba por detrás (¿?¿?), al parecer aquí uno se mete en el bus y paga cuando se baja (?¿?¿?)...toma ya, yo creo que esto lo hacen para partirse el culo de los pobres occidentales porque saben que allí primero se paga y luego se pregunta.

El canadiense (llamado X) resultó un tío muy simpaticote que trabaja en Osaka y que lleva dos años por estos lares (la gente pega unos saltos...)...nos indicó la dirección de la parada y nos despedimos...en la salida del bus llegó el segundo quede de los nipones.
La máquina para cobrar tiene tres “entradas” por llamarlo así...una que parece un coladero, otra de monedas normal y otra de billetes.
Los billetes cuestan 220 los adultos, por lo que como no tenía cambio metí un billete de mil en la ranura, cogí el chorro monedas y venga “hasta luego”...nooooooooo, quieto ahí, la ranura de los billetes es para cambiar moneda, ahora toca pagar los billetes...ah, ok. Pues meto una de quinientas por la ranura de monedas y “ok, see you”....nooooooooooo, quieto ahí (sudor frío y “qué cojones pasa aquí ahora?”), la de la ranura es para que te de monedas sueltas para poder meter el importe exacto...por el coladero! XD
Incluso el conductor al final me pilló las monedas y las metió él en la hucha, qué grande...es lo que hay.

Luego pillamos el bus hasta Gion, el 207 (le preguntamos a otro caballero por si acaso y el hombre estuvo a nuestro lado hasta que llegó, sólo faltó que nos subiera en el bus, hemos dicho que son muy educados?), conducido por Barry White encarnado en nipón (y con máscara de esas que llevan, como Toriyama en la Arale)...grandioso, cada vez que llegábamos a la parada el tío soltaba una frase muy gutural...muy Barry...con lo que acabamos medio cantando la de “you're the first...” con el cachondeo. Qué impresentables.

Llegamos a la zona de Gion y decidimos serpentear las callejuelas. La zona es preciosa, pero tremenda tremenda...es un barrio de casas todas tipo ryokan, de madera oscura, clara algunas y jardines pequeñitos tipo zen...con farolillos por las esquinas y un aire muy clásico...incluso vimos algunas Geishas paseando por sus calles y gente detrás de ellas intentando sacarles fotos.
A pesar de ser una zona muy turística, pudimos perdernos por sus inacabables callejuelas y estar solos la mayoría de las veces, llegando a un santuario que estaba vacío y en el que nos hemos sacado algunas fotos a la luz de los farolillos rojos...muy chulo. Precioso.

Gion nos ha encantado. Algo más tarde regresamos hacia la calle principal y miramos algún sitio para cenar, estuvimos mirando varios sitios pero tenían pinta de ser algo carillos (claro que cenar en ese enclave es lo que tiene) hasta que encontramos uno que tenía unos precios bastante ajustados para el sitio y la zona.
Nos metimos y cenamos cerdo a la pimienta, tempura de pescado y verduras y shimbashi al teriyaki, regándolo todo con agua....es broma, con cerveza. Unos 4000 y pico yens la cena. El sitio muy bonito, con tatamis de madera, suelo empedrado y luz tenue mientras el cocinero hacía los platos delante tuyo...el nombre imposible, todo en japo.

Salimos y como nos gustó tanto la zona nos comenzamos a meter por callejuelas (ya fuera de Gion). Hay cientos, miles de bares y tiendas por calles muy estrechas en la que hay gente para parar un tren pero que se camina sin problemas (a pesar de ser hora punta).

Algo cansadetes decidimos volver al ryokan (oooh que pena...) así que pillamos el 32 que nos llevaría hasta la parada de Omiya Gojo, esta vez sin Barry, lástima. Cuando bajamos nos situamos en el mapa y caminamos calle abajo pensando que llegaríamos al templo de Nishi Honganji Mae pero al rato vimos que por ahí no tenía pinta de aparecer el templo...revisando el mapa nos dimos cuenta que estábamos en la calle de al lado de la parada en la que debíamos haber ido...la madre que...
Bueno, preguntamos a un taxista por la parada en cuestión y nos dijo que estaba algo alejada...aquí dos o tres intersecciones son distancias enormes y como coger el bus (con transbordo incluido) nos costaría casi lo del taxi decidimos ir en el taxi hasta el hotel.

El trayecto fue rápido y nos salió por 800y. Ale, ya hemos probado los taxis. Muy cómodos, con un GPS enorme y con unos pañuelos en los asientos como los que tejen las abuelas.

Mañana toca templos!.

Un saludo!.

2 comentarios:

  1. Bueno bueno ya he visto que has arreglado las fotos!!

    Envidia!!!!


    Disfrutar!!!

    Sobre lo demás... Ya hemos encargado una sauna individual para cuando regreses!!

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  2. Pues no se por qué no funcionan los "slides" :(
    Bueno, he puesto el link directo en otro gadget e iremos subiendo fotos (me sube 5 fotos de una media de 3 megas en unos 10 segundos jurl!).

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