31 de diciembre de 2011

Bye 2011

De nuevo otro año que se va, en el que una vez más el núcleo estuvo marcado por un viaje rodeando Europa por algunas de sus ciudades más importantes, todo un reto en 22 días que cumplimos y que se añadió a nuestra visión del mundo. Un mundo cada vez más conectado por las redes sociales (a ver si uso algo más el twitter este año...pero es que...es que....) y en el que, a la espera de que llegue la universalidad en forma de conexión para todo el mundo, ya es posible darse una vuelta completa a través de las cuentas de Twitter, Facebook o Flickr conociendo de primera mano esos lejanos lugares.

El viaje resultó toda una experiencia, no tan exótica como ir a un país en el que mires a donde mires no entiendes una mierda de lo que indican los carteles, pero muy enriquecedor en cuanto a cultura sobre el viejo continente, en conocer gente y, por qué no decirlo, viajar en tren siempre resulta muy entrañable, sobre todo cuando vas más de 8 horas sentados y apretujados con 8 personas en un camarote mientras en los pasillos se "amontonan" viajeros, gallegos muy salaos incluidos. En esos momentos compartes, ríes, conoces, entiendes...


Además del viaje central, laboralmente no podemos quejarnos y aparentemente la cosa va bien, tenemos salud y  vivimos en paz, muy en paz con nosotros mismos, cosa a la que cada vez le doy más importancia en la vida.

Se me pasaba comentar lo de que el año que viene se acaba la vida tal y como lo conocemos y tal y pascual...bien, a mi me encantaría que pasara algo megachulo, rollo que vinieran extraterrestres, que nos enseñen a dejarnos de guerras absurdas, a saber compartir o a ser más humildes y aprovechar mejor el planeta (todo esto es gratuito, lo sé)...pero en 2005, estando en las ruinas de Cobá (coño, parezco Iker Jiménez), charlamos con un descendiente directo de los mayas y que nos transmitió increiblemente bien toda su cultura, ideales...debatimos incluso sobre sus costumbres más jevis, su final...de forma muy abierta y sin pedir pasta, con lo que todo resultó bastante transparente, tan transparente resultó que incluso nos comentó sobre el supuesto 2012.
Según él, y por lo que le había llegado a través de generaciones, los mayas simplemente dejaron de contar a finales de 2012 porque no lo vieron necesario, era una fecha tan futura que no les hacía falta predecir más eclipses y mandangas para sus ceremonias...por no mencionar ya su declive como sociedad "compacta", en la que cada uno tiró por donde le rotó. Tal cual.

Por supuesto, todo puede ocurrir, no seré yo el que joda el espíritu Fox Mulder a la gente.

Así que por encima de todas las cosas, espero les vaya realmente bien el nuevo año y tengan salud.

Feliz año 2012.

 

While my Guitar Gently Weeps - "The White Album" The Beatles

Un saludo!

26 de diciembre de 2011

Capitán América: First Avenger

Debo reconocer que he leído más al Capi de Superlópez que al mismísimo Capitán América, y mucho más después de que hace años viera la adaptación que Albert Pyun realizara del superhéroe americano. Tengo unos recuerdos infinitamente malos de aquella peli, en la que uno se pasaba más tiempo viendo el micro y el equipo de rodaje en los reflejos de los coches que en sus ridículos personajes.

Así que de esta cinta de Joe Johnston no me atraía lo más mínimo, y una vez vista la verdad es que me alegro en parte de no haberme acercado al cine.


La historia parece ser una adaptación directa de la original, contando como un mequetrefe, pero increíblemente patriota y con unos valores muy potentes en cuanto a compañerismo, valor y y honor, es utilizado para un experimento en el que quieren crear supersoldados para combatir las fuerzas del mal, digo nazis.

Cabe destacar, que el personaje del Capi (el yanki), fue utilizado como propaganda anti-nazi durante la Segunda Guerra Mundial de forma descarada, en el que aparecía en su primer número propinando un puñetazo a Hitler. Siendo olvidado una vez "pasada" la contienda, para más tarde volver con Los Vengadores, título que recuperaré más tarde para justificar probablemente en parte esta cinta.


La peli no tiene nada que ver en cuanto a factura, interpretación y efectos con la presentada a principios de los 90 por Pyun, gracias a Dios, en su lugar tenemos una cinta que arranca bastante bien, con una ambientación lograda y amena, pero es a partir de cierto punto que se desinfla un poco para acabar mostrando más de lo mismo sin llegar a entusiasmar y con algunos momentos muy predecibles y poco llamativos.

A pesar de todo el intento no es malo, ciñéndonos a lo que quiere contar, al contexto histórico y a que simplemente es un producto de entretenimiento que rinde homenaje a un personaje muy querido por los estadounidenses, Capitán América cumple su cometido, pero creo de recibo destacar que no asombra como cintas tipo Batman (incomparable a cualquier otra diría yo).
He leído comentarios sobre lo ultra-americana que resulta....no sé qué decir sobre una cinta que se titula Capitán América...es decir, bueno, yo no esperaba una crítica a MacDonalds precisamente.
Mi valoración también mejora quizás por haber sido testigo del pestiño Green Lantern recientemente.

El Capi es del Atleti

Llegados a este punto recupero el título de Los Vengadores, pues una vez finalizada, sirve como nexo para unir algunos superhéroes que hemos visto recientemente en pantalla, como son Iron-Man o Thor, en lo que será la próxima peli Marvel al parecer, y que unirá a estos personajes. De todos ellos el protagonizado por Robert Downey Jr. es el que más juego puede dar y del que mejor adaptación, en mi opinión, se ha realizado últimamente (la primera, la segunda es un puto bodrio).

Así que en definitiva tenemos una cinta para pasar el rato, que no sorprende pero que no incordia ni se hace excesivamente pesada para pasar una tarde palomitera.

Un saludo!

19 de diciembre de 2011

American Horror Story

En alguna que otra ocasión he comentado mi desencanto con el cine de terror, creo que es un género bastante trillado y que últimamente salvo alguna excepción como Insidious o alguna con componente viral a modo de márketing tipo Paranormal Activity, suelen colarse verdaderos bodrios e historias requetesobadas. Convirtiendo el género en un recurso al que acercarse simplemente para intentar pasar un mal rato ante la pantalla, aunque el sentimiento al finalizar en el fondo sea de indiferencia.
Como no podía ser de otra manera, en multitud de ocasiones deriva en pelis que rozan más la acción con algún monstruito y alguna escena violenta que otra cosa, para sobrevivir en simbiosis con otros géneros más accesibles o maleables.

Pero gracias a la gran época de series que estamos "sufriendo", cada vez son más los productos que deciden suministrarse a lo "cuentagotas", pudiendo jugar con diferentes aspectos que en hora y media dos a lo sumo no dan tiempo de exprimir.

Es el caso de American Horror Story.


Una serie que de haberse trasladado a largometraje, probablemente estaríamos hablando de más de lo mismo, con algo de componente sádico y una familia que acaba desquiciada por la casa de marras.

Pero el formato 40 y pico minutos semanales, unido a la calma con la que se puede mostrar a sus personajes, profundizar en ellos y mostrarlos ante situaciones grotescas a tope, provocan un enganche tremendo en una historia que no da respiro, en la que cada pocos minutos se azota al espectador con algún giro, trama o susto. Es como una montaña rusa, y juega con las emociones de forma fantástica.

Pero la cosa no queda en un pulso fantástico, la factura en general está muy conseguida, siendo incluso las escenas más "normales" o de transición muchas veces una delicia visual, con unos encuadres torcidos que transmiten cierta demencia o primeros planos sobrecogedores. Un producto tratado con mimo.

Pero dejando aspectos técnicos de un lado (ojo la banda sonora, fantástica también...ya paro!), donde AHS gana por goleada es con sus personajes.


American Horror Story cuenta la historia de los Harmon, una familia que se traslada a Boston para intentar una nueva vida tras el perdón recibido por parte de la matriarca tras la cornamenta que le marcó a la misma Ben, su marido, un psiquiatra que tiene serios problemas para controlar la líbido. Redondea la foto familiar Violet, una adolescente en mitad de un temporal marital, con lo que ello conlleva.

Comenzará un desfile de personajes encabezado por una tremenda Jessica Lange en el papel de Constance, una vecina estrambótica que lanza dardos envenenados por la boca a la vez que guarda los secretos de la casa.  Veremos al primo hermano de "El Tarado" de Pulp Fiction, en una escena extraña como ella sola, pero que servirá bastante para entender el devenir de los sucesos en un "todo vale". Una chacha que es vista como una pin-up por el marido y como una anciana por la esposa...hasta Zachary Quinto (Mr. Spock 2009) tendrá su personaje.

Y finalmente tenemos a Tate, un chaval algo problemático.


Los líos, giros y situaciones rocambolescas se suceden de forma continua y en "non-stop", la trama se complica, añade matices, personajes, se vuelve más rica a cada episodio y sorprende, jugando con factores psicológicos de forma fresca y directa, sin tapujos.

De momento, parece que la serie goza de buena salud y en fox es cita obligada los lunes por la noche. Vistos los 6 primeros episodios, si uno se para a pensar en todo lo que ha avanzado la trama en cuanto a situaciones, personajes y giros, abruma.

Muy recomendable, aunque no apta para todos los públicos.

Un saludo!

16 de diciembre de 2011

12 de diciembre de 2011

El origen del planeta de los simios

A estas alturas probablemente raro es el caso que no tenga conocimiento de la cinta que en su día impactó al público primero por su excelente labor en cuanto a maquillaje y, por supuesto, por mostrar uno de los finales más impactantes del género, recordado por todos e imitado en muchas ocasiones.
Creo recordar que la primera vez que vi la peli entera fue en una excursión de colegio en bus, como el trayecto era tan largo, era la peli perfecta para mantenernos ahí un rato callados. La mayoría rechistaba, a mi me dejó fascinado.

Bastante ha llovido desde entonces, entre precuelas y "reboots", perpretado por un Tim Burton en no demasiado estado de gracia. La cinta que nos atañe hoy debería considerarse ciertamente como el origen de todo el entuerto.

La cinta nos pone en la piel de un investigador neurológico que busca la cura del alzheimer, interpretado por un correcto, sin más, James Franco. En su carrera contra las farmacéuticas, experimentará con el animal más parecido al hombre, dando como resultado un primate con una inteligencia fuera de lo común.


Rupert Wyatt presenta simple y llanamente un entretenimiento haciendo uso de forma correcta de ciertos aspectos de la licencia original para poder transmitir al espectador cómo degeneró todo en las películas antiguas.

Se puede pensar que hay ciertos clichés y situaciones algo forzadas, ciertamente las hay, pero no pasa como en otros productos que de tan grotescamente insertados acaban por desconectar al espectador, no, en su lugar tenemos un producto que busca primero ser respetuoso con la obra original y segundo ser un puro entretenimiento. Yo creo que lo consigue.

El pulso narrativo es muy dinámico, las escenas de acción están muy bien dosificadas y ciertos elementos, como el aspecto de "reclusión" del amigo César resultan un elemento más que destacable en una cinta que pasa como un suspiro y que termina por dejar un buen sabor de boca a pesar de sus fallos.

Un aspecto que he escuchado que resulta muy cantoso son los efectos especiales sobre los simios, personalmente creo que ciertas expresiones estan increiblemente bien reflejadas, transmitiendo perfectamente el sentimiento. No digo que no se aprecie el efecto generado por ordenador, pero si recordamos que hablamos de cifi, convence de sobras.

En resumen un blockbuster con algunas situaciones rocambolescas pero que resulta muy entretenida.

Un saludo!

5 de diciembre de 2011

In Time

Con lo caras que se venden las pelis cifi decentes, no es de extrañar que nada más estrenarse In Time, y con el nombre de Andrew Niccol tras el proyecto, me apresurara a ver qué tal estaba la peli, por desgracia, parece que el director de Gattaca y Lord of War esta vez no ha dado con la tecla, en lo que se podría considerar como un paso atrás en la carrera de este interesante director.

En un futuro próximo, la humanidad vive 25 años por una modificación genética, a partir de ese momento, disponen de 1 año que se irá consumiendo hasta provocarles la muerte.

Esto es así porque sí.


La idea a primera vista puede resultar interesante, y más sabiendo que en Gattaca, donde se trataba el tema genético, el resultado fue bastante satisfactorio, pero conforme los minutos pasan en esta In Time vemos que todo va quedando diluido, sin fuerza y por si no fuera poca la desilusión, con escenas realmente mediocres.

Empezando por un elenco de actores extrañamente escogido, con un Cillian Murphy que está totalmente desaprovechado en un rol anodino de "Guardián del tiempo", pasando por un Timberlake que, a mí personalmente me parece un tipo simpático, pero que no acaba de convencerme en sus papeles ya que en mi opinión le falta ese pasito interpretativo que hace que los personajes sean creíbles, sobre todo en escenas dramáticas.
La elección de las chicas ya me parece más extraño, dando el relevo de la experiéncia de Olivia Wilde a una Amanda Seyfried que simplemente pone ojos y piernas en un papel predecible hasta la saciedad, como muchas otras cosas de esta cinta.

Pasando de página en cuanto a interpretaciones, el componente cifi queda relegado al efecto chulo fosforito en los brazos de todo ser viviente, un par de mods en coches que hacen que queden bastante cañís y algún que otro lector de tarjetas, nada llamativo. No hay ciudades futuristas, ni ventanas hacia nuevas maneras de vivir o inventos "raros" que tanto gusta al seguidor de la ciencia ficción.

Y finalizamos con el guion, totalmente perdido entre los clichés más típicos, el torpe pulso narrativo y cierta sensación de lo que podía haber sido y no fue. Porque a pesar de que la historia podía haber sacado algo interesante (o simplemente entretenido), ya sea orientando el tema hacia una vendetta más ácida y malsana o hacia un thriller conspiranoico algo más elavorado, el caso es que el resultado final deja un pobre sabor de boca.

Fallida, y por momentos, bastante fallida. Seguiremos depositando esperanzas en Prometheus, en directores como Duncan Jones y en que Niccol recupere el olfato.

Un saludo!

2 de diciembre de 2011

Mysteries of Love

Venecia es de esos lugares que cuesta que deje indiferente. Con seguridad escucharás experiencias muy variadas de una u otra persona que haya estado...el olor de sus canales, el turisteo, los precios....

No seré yo el que niegue que es destino top en cuanto a turismo, pero por fortuna conseguimos bloquear bastante bien ese apartado. Como regalo por haberlo conseguido, nos encontramos una ciudad que durante el día brillaba, ofreciendo pequeños regalos en forma de rayos de luz atravesando sus angostas callejuelas, con sitios escondidos donde poder comprar algo de comer a buen precio, o un parque donde estirarnos sobre la hierva como en la isla de Burano, con el mar de fondo, casas multicolor a la espalda y ningún otro sonido.

Por la noche, nos dejamos llevar por sus laberínticas calles, cantamos "el jinete" (como pudimos dado nuestro estado al final de la misma) y nos quedamos embobados con la única luz de las farolas sobre los canales.



Mysteries of Love - Angelo Badalamenti, Blue Velvet OST

28 de noviembre de 2011

Melancholia

Lars Von Trier pertenece a ese conjunto de cineastas que intentan hacer algo fuera de lo común con sus trabajos para distanciarse de cualquier tipo de etiqueta....no sé a ciencia cierta qué es lo que le pasa por la cabeza a este personaje, pero está claro que, visto su movimiento Dogma, su intención es la de que jamás se le relacione con cine comercial o pueril.

 Solo hay que ver Dogville para entender de que pie cojea este hombre, obra que por cierto a mi en su día no me disgustó.

Con Melancolía, cinta que ya sonó hace unos meses debido a las palabras que soltó el pájaro en una rueda de prensa comentando que "entendía a Hitler", es curioso, pero se vuelca en algo que, aunque él no reconozca, puede incluso rozar la cinta "normal" o enfocada más comercialmente, con momentos de drama puros en los que no hay más doble sentido que el que se ve en pantalla.

Melancolía nos cuenta la historia de Justin, una "aparentemente" exitosa publicista interpretada por Kirsten Dunst, la novia de Spiderman, que celebra su boda rodeada de amigos y familiares. Pasada la celebración, el planeta Melancolía parece aproximarse a la Tierra con amenaza de impacto y la consiguiente destrucción de la humanidad. Toma ya.


Algunos dirán, qué cojones pinta la boda? más cuando ocupa la mitad de la cinta. Pues bien, sirve básicamente para preparar a los personajes y al espectador para su segunda parte. Y este es, para mi, el mayor error de la cinta, y es que puede resultar demasiado forzada con su mensaje debido a la utilización porque-a-mi-me-conviene-que-así-sea-ahora de sus personajes y situaciones.

Su primera parte sitúa a una serie de personajes alrededor de la protagonista para que esta se vaya hundiendo poco a poco en una depresión. Evidentemente estos personajes son a cada cual más falsos, hipócritas y tristes. Añade un planeta que se acerca (si entramos en temas físicos ni te cuento lo que podríamos sacar de todo esto) y ya tenemos el caldo perfecto para que la prota se luzca con aspecto de zombi durante el resto de metraje.
La dualidad entre las dos hermanas en su segunda parte no hace sino potenciar un mensaje que acaba por ser cansino e incluso, absurdo, a pesar de que Charlote resulta como personaje muchísimo mejor que el de Dunst, más completo y firme.


Que no se malinterprete mi mensaje, evidentemente su historia es totalmente posible a nivel emocional (otra cosa está por ver como se reaccionaría ante una amenza de tal calibre), y por familias raras será, pero el tufillo a elementos puestos con calzador sobre la pantalla se hace constante, y a mi personalmente me provocó un poco de desconexión con la historia, creo que se puede presentar de forma más elegante para el espectador.
Tiene cosas rescatables e incluso alguna fotografía "de cuadro" que es bastante resultona, aunque como casi todo, incrustado de forma muy artificial. Su prólogo, a pesar de ser bonito, te destripa practicamente toda la cinta, y encima en cámara lenta.

Opinión partida con esta obra de Trier, si me tengo que decidir, no obstante, diría que es fallida.

PD: No podía dejar esta entrada sin el mejor homenaje a su director, disfruten;

 
Un saludo!

25 de noviembre de 2011

Don't try so hard

Hay grupos que forman círculos tan completos en su discografía que se hace difícil imaginar qué más podían haber aportado. Hendrix incluso poco antes de morir comentó en cierta entrevista que creía haber cerrado dicho círculo....los Beatles prácticamente lo inventaron todo....

Queen era de esa misma especie, con cada trabajo se superaban hasta llegar a registros de verdaderas Masterpiece...lamentablemente su tiempo se agotó de forma prematura...

Ayer día 24 se cumplieron 20 años del fallecimiento de una de las voces más prodigiosas que he escuchado jamás.


 

Don't try so hard - Innuendo

21 de noviembre de 2011

Terciopelo Azul

David Lynch es de esos directores a los que la mayoría de la gente mira con respeto, con reparo y con un "ojo con lo que vamos a ver de este hombre, que se le va bastante".

Afortunadamente, creo que en casi todas sus obras consigue llamar poderosamente la atención del espectador que no se contenta con simplemente seguir la historia, que le den un giro y se termine el asunto.
Lynch quiere transmitir sensaciones, sacar lo grotesco, lo extraño, ese ser ultra-interior que cruza el límite y que se convierte en momentos en el "todo vale". Y a Lynch le sale bien.

Terciopelo azul es una cinta ya algo viejuna, concretamente del 86, y que nos sitúa en un apacible y típico pueblo norteamericano, con sus buenas gentes, niños cruzando la calle para ir al cole y el abuelete regando el césped.

Al son del tremendísimo tema de "Blue Velvet" nos lleva en volandas de una situación a otra hasta que se rompe la armonía con un extraño accidente en el que un hombre cae fulminado por una especie de ataque al corazón.


El hijo de este pobre infeliz, volverá a su pueblo natal para ayudar en la tienda de su padre mientras este se recupera. En una de sus caminatas, se encuentra una oreja humana y a partir de aquí la cinta se paseará entre el thriller, el suspense y el terror mientras acompañamos al joven en su particular investigación al verse totalmente seducido por el misterioso caso.

Antes de ver esta cinta, es de recibo entender el contexto en el que está ideada. Lynch comentó que en su casa jamás pasaba nada. Sus padres no discutían, no fumaban, no bebían...jamás pasaba nada, y él quería que sucedieran cosas extrañas, inverosímiles, que se les fuera la pinza, vamos.

Pasado este pequeño inciso se puede empezar a ver la peli, y entonces quizás entendamos esos cambios extraños, esa armonía rota y esa continua búsqueda del paso siguiente, aun rodeándose de personas extrañas y que parecen ser de otro mundo. Sin olvidar el buen hacer tras las cámaras, con un pulso fantástico para presentar  personajes a cual más dispar y que nos mantengamos entretenidos con el curso de la historia.

Y es llegado a sus personajes en los que Blue Velvet explota, presentando a un Dennis Hopper que simplemente es la locura, la maldad y el caos personificado. El eslabón perdido, vamos. Hipnótico y desagradable a partes iguales, conducirá al prota, un Kyle MacLachlan totalmente infundido en su papel de explorador de sensaciones, hacia un descenso total a los infiernos.


Isabella Rosselini funciona a la perfección como enlace entre el mundo real de Kyle y lo sórdido de Dennis, regalándonos algunas escenas de pura sensualidad y que, tal y como ya pasara en Mulholland Drive (aunque en mi opinión superior el "manejo" de gachís en aquella por parte del director), consigue realmente perturbar al espectador y llegar a puntos de duda entre demencia y realidad.

BV está claro que no es para todos los públicos. Probablemente más de uno se eche para atrás a los pocos minutos quizás sin llegar a los niveles de Malick o Von Trier, pero si se consigue conectar y dejarse llevar por una atmósfera oscura, opresiva pero tremendamente bella y con una historia "detectivesca" muy resultona, se puede disfrutar de una de las películas más redondas y una total y absoluta para mí obra maestra de Lynch.

Muy recomendable.

Un saludo!

18 de noviembre de 2011

The Wall

Recuerdo la locura que fue el primer día en Berlín. Llegamos con muy buen tiempo, las plazas estaban animadas con artistas callejeros y mucho movimiento. El sol parece activar a las gentes de Europa, un rasgo distintivo y probablemente mundial.
El vaivén constante de gentes, el tráfico, bicicletas y ejecutivos se mezclaban con manifestaciones multitudinarias al son de Amy Winehouse...una locura.

Y en mitad de todo eso, un museo en forma de calles, en las que poder ver y leer la historia reciente de una nación que expone sus miserias para que todo el mundo las vea y no sean olvidadas.



Por algo se empieza.


Another Brick in the Wall Part II. Esta es una versión de Class 99, supongo que "algo" menos conocida que el mítico tema de Pink Floyd. Un "súper-grupo" creado para la ocasión en la cinta de Robert Rodríguez The Faculty.

14 de noviembre de 2011

Biutiful

El director de Babel  y 21 Gramos se atreve a contarnos la historia de Uxvald, un barcelonés que sobrevivir a base de trapicheos e intenta educar como mejor puede a sus dos hijos en un ambiente marginal y duro.

Tenía bastante pereza de ver la obra de Inárritu, sabía que me iba a encontrar una obra gris, tipo "Los lunes al sol", depresiva y además con momentos lacrimógenos varios. En ocasiones a uno simplemente no le apetecen ciertas cosas. Pero hice acopio de fuerzas y me lancé a verla, por fortuna todo salió mejor de lo que esperaba.

La cinta no es la alegría de le huerta, eso está claro, Inárritu presenta una cinta crepuscular, con un retrato muy de bajo fondo en el que vemos los límites de la pobreza bastante cerca, gente sufriendo, dramas personales y una sociedad "oculta" que sobrecoge.
La estocada viene dada cuando pasados los primeros minutos, nos encontramos con que el cáncer sacude al protagonista, lo que añade al hilo argumental un inexorable final que poco a poco se cierne sobre el espectador, espectante, intentando incluso no colaborar con la historia para no verse implicado, al fin y al cabo, quién quiere pasar por ese mal trago?


Pero Iñárritu, en mi opinión, no utiliza el gen lacrimógeno gratuitamente, no, en su lugar sigue contando la historia, sacando fuerzas de flaqueza de un memorable Bardem, que lo borda de nuevo en otro papel y que lo confirma como un tío que sabe actuar y transmitir. Avanzamos en dramas personales, en la vida, en cómo solucionar las cosas y en qué está en nuestras manos para hacerlo. Todo a través de una fotografía sublime en muchas ocasiones, sacando la parte gris oscura de muchos lugares, con muy poquito y mostrándolo con maestría. Puedo añadir, además, que ciertas localizaciones que aparecen estaban muy cerca de  donde me crié, y aunque he leído que es una visión muy pesimista de Barcelona, también es de recibo señalar que en los días más nublados son así, para el que los quiera ver. Como también brillan en los días claros.

Una historia muy visceral, con un arma de doble filo en cuanto al sonido de algunas escenas, siendo prácticamente susurros indescifrables en ocasiones, pudiendo molestar al espectador, pero en otras resultando todo un acierto, como cierto momento en el que al fundirse en un abrazo escuchamos el latido del corazón. Sentimiento puro.

Biutiful es de esas obras grandes, pero que se ha de tener cuerpo para ver y aguantar, una historia que se tenía que contar.

Un saludo!

7 de noviembre de 2011

Attack The Block

Desde Sitges ya se escuchaba que una cinta de un grupo de chavales pegaba fuerte. Se trataba de Attack the Block y su historia nos situaba en un barrio "algo" marginal de Londres mientras se sufría un ataque alienígena.

Joe Cornish, "conocido" actualmente por ser uno de los guionistas de Tintín, se marca una cinta muy entretenida, con un ritmo fantástico y con unos personajes que lo bordan, en forma de pandilleros anti-héroes muy gamberros y desprovistos de cualquier estereotipo americano.


Ese probablemente sea uno de los puntos más fuertes de la peli, sus protagonistas, que a los pocos minutos de conocerlos ya nos tienen ganados, resultan reconocibles y nos reímos con sus ocurrencias a cada minuto que pasa.  Además, las continuas y chocantes situaciones resultan muy bien hilvanadas bajo una interesante crítica social.

Porque a pesar de que la cinta es un puro entretenimiento con toque cifi, tiene esa pequeña crítica disimulada algo inocente pero de agradecer, sin artificios y, en mi opinión, sincera. Mofándose incluso de los típicos clichés de su propio género, resultando sólida en su propuesta.

Mención especial a la banda sonora, no soy muy aficionado al hip hop. Bueno, más bien no soy aficionado al hip hop, pero hay que reconocer que las melodías, fusionadas con otros géneros, lucen tremendamente bien, llamando la atención poderosamente en más de una escena.

No hay que esperar grandes efectos especiales, ni destrucciones masivas o mundos apocalípticos, no, aquí tenemos un barrio cualquiera, con sus lúgubres callejones y mucha mala leche. Lo mejor de todo es que nada chirría ni parece cutre, al contrario, la fotografía en muchas ocasiones es estupenda. La ambientación consigue que nos mantengamos pegados y alerta en todo momento a la pantalla.

Todo un productazo que las distribuidoras ya se están pegando mordiscos por lanzar en distintos países.

La hermana bastarda de Super 8. Muy recomendable.

Un saludo!

4 de noviembre de 2011

Melancolía for SNES

Voy a marcarme un remember jueguil del bueno de hace muchos años, a ver lo que recupero de aquellos días...

No recuerdo exactamente el año...1992? 1993? Bueno, el caso era que por aquél entonces las preocupaciones eran otras bien distintas y la era de las videoconsolas pegaba fuerte desde hacía algún tiempo, era un mercado quizás "dormido" en nuestro país, pero que poco a poco se vislumbraba como algo muy potente en un futuro.
Yo por entonces tenía mi fiel Spectrum, algo agónico ya y del que recuperaré algún remembering más adelante, y una Master System 2 producto del bollo, nunca mejor dicho, pues me tocó en un concurso del Bollycao.

Pero el anhelo por entonces venía de un bicho que allá por 1992 vio la luz en nuestro país y que se llamaba Súper Nintendo, arropada por una campaña de publicidad que te convertía en yonki nintendero de inmediato a lo poco que te gustasen los videojuegos o fueses un pro Sega, rival directa y cuya competencia se convirtió en guerra entre usuarios, más o menos lo que pasa hoy entre Sony, Microsoft y la propia Nintendo.


LA caja.

Malditos vídeos en VHS que regalaba la Hobby Consolas en los que te ponían los dientes largos con títulos como F-Zero, algo nunca visto hasta entonces, con Castlevania y con un título que sirvió de lanzadera total para que millones de personas se lanzaran a por ella, Street Fighter II.

 Creo que puse esta cinta...muchas veces.

A mi como cualquier otro hijo de vecino el juego de Ryu y compañía me encantaba, y me dejaba los buenos 5 duros echando alguna partidilla e incluso deduciendo el nivel de dificultad de la máquina, viendo viable el jugar o no. Cosas de críos.

A todo ello se sumó que estábamos en plena edad dorada de Dragon Ball en nuestro país, y para más inri, recuerdo una tienda de videojuegos (bueno, ahí vendían de todo) que caía en mitad del camino hacia la escuela y que mostraba en sus vitrinas un cartucho pinchado en una SNES mediante un adaptador de cartuchos de importación (porque los juegos no eran discos, eran como cargadores de AK-47), el título rezaba Dragon Ball Z y tardaría unos años en llegar a nuestro país....era una tortura infinita pasar por allí y ver el opening del maldito videojuego.


Así que no sé cómo...ah, si, fue aprobando octavo de EGB, me cayó un "regalillo" en forma de consola pelá y que costó la friolera creo recordar de casi 20.000 pesetas. Amén de que tuve que renunciar al viaje de fin de curso, trabajar extra y fregar platos hasta la eternidad (bueno, diría que para noviembre bajé el ritmo a lo exigible legalmente)...fíjate tú, yo renunciando a un viaje...era a un puto hotel cerca de Andorra creo, yo voté Mallorca y los muy pepinos se fueron a un puto hotel?! Luego me vengué y me piré a un par de sitios y llegué hasta donde...bueno, da igual, que me desvío.

Durante los primeros meses viví del lúgubre mundo de los alquileres, aquellos en los que el frío lunes debías devolver el juego aun no habiéndomelo pasado (rara vez, porque me ponía en modo berserker cuando me liberaban mis obligaciones de crío y me fundía lo infundible), hasta que pude comenzar a currar de repartidor y así pude ir ahorrando algunos dineros para finalmente poder adquirir algún título. Por fortuna acabar octavo parecía significar poder trabajar fuera del ámbito familiar o de tu barrio, con el consiguiente desligamiento del cobras lo que a mi me parece...para cobrar una puta mierda.

Pude incluso alquilar aquél Dragon Ball Z que prácticamente se deshacía en tus manos del desgaste que llevaba el pobre (las últimas veces lo pinché directamente en la consola y funcionaba sin adaptador!). Ver danzar a Goku y Satanás en pantalla era lo más, esa combinación de botones, carga de energía y lanzar el puto Kame....FuuuaaAAAA!!!
 
Mis buenos duros me dejé en la recreativa de las Turtles con los amiguetes...ahora lo podía tener en casa!

Así que poco a poco llegaron títulos como Mario Kart, otra cosa no vista hasta entonces, adictiva hasta el infinito y que hoy en día todavía veo colear en Wiis en las que uno emula a un Jedi...qué cosas...yo solía decir que el cable se quedaba corto y que se podía aprovechar el movimiento cinético (bueno, cinético no entraba en mi vocabulario entonces) para dirigir el auto. Coño, podía haberme forrado llamando a Miyamoto de no haber gastado el tiempo en videojuegos y peliculillas.

La consola era un puto prodigio y cada vez se presentaban títulos con mayor calidad para satisfacer a un mercado que exigía mejoras y sorprenderse con las nuevas creaciones.
Uno no creo que fuera muy consciente entonces (o quizás si), pero títulos como Castlevania IV que tenía una banda sonora simplemente espectacular, y que incluso actualmente suena mediante un desbloqueable en el pro evolution, resulta que fueron toda una revolución.  Llegaron títulos como el mencionado Street Fighter II y sus 16 megas, creo que lanzado en navidades y que generó una avalancha de compras en la que sólo faltaban alunizajes en las tiendas para llevárselo. Recuerdo que la busca y captura de amigos que tuviesen el maldito título se pagaba cara, incluso habían algunos que guardaban silencio, pero eran descubiertos más tarde o temprano, por las ojeras, y porque eran críos, y tarde o temprano debían fardar del asunto.

Siguieron Master Pieces tales como Zelda:  A link to the Past, primer acercamiento al RPG (juego de rol) que dominaría con fuerza en el futuro y que se convertiría junto a los de temática lucha en verdaderos tops del catálogo, algo así como pasó con los FPS (juego de pegar tiros en los que sólo se ve el arma) tipo Wolfenstein o Doom...o la evolución de juegos de estrategia a lo Warcraft...


Zelda marcó un hito, era largo de cojones, tenía una factura impecable y encima nos mostró que era posible mostrar un argumento sólido dentro del mundo de los videojuegos, más allá de pasar fases.

Así que no era raro ver como poco a poco se inundaban las tiendas de títulos RPG del país del Sol Naciente, al que mirábamos con ojos de deseo (qué coño, con una envidia que ni te cuento) absoluto a través de las cuatro o cinco páginas mensuales que nos llegaban en la prensa especializada y que servían para entender que los nipones nos llevaban no años, décadas de adelanto, llegará esto algún día? Cómo cojones lo consigo? Dónde estaba Amazon?

Poco a poco fuimos disfrutando de títulos punteros, como aquél Starwing que utilizaba el chip súper FX, y que mostraba gráficos poligonales en movimiento, otra cosa tipo "lo nunca visto" (se entiende la revolución que causó la consola de marras?) y que recuerdo como de las experiencias más tremendas, sobre todo con aquél final que tras batallar con un un enemigo imposible terminabas la historia con alguna baja entre tus compañeros, con un ala medio partida y volando hacia el horizonte, los pelos como escarpias del momentazo, dolores en los dedos de las manos, pero Mission Accomplissed!


El todopoderoso Starwing y su chip Súper FX. Arrodillaos.
El mercado de Sant Antoni en Barcelona se convertía en lugar de peregrinaje muchos domingos, íbamos con los colegas a ver qué se podía conseguir, cambiar y a ojear títulos de importación. De allí conseguí títulos como Zelda, Castlevania (lo acabé comprando, era demasiado bueno), Secret of Mana, Starwing, Flashback, Ranma o incluso el Dragon Ball, que finalmente llegó a nuestros lares.
Los precios oscilaban entre las 8000 y 12000 pelas los nuevos, pero buscando y cambiando podías conseguir por entre 2000-6000 algunos.

Mi relación "física" con Snes finalizó allá por el 95-6, ya que la acuciante necesidad de música, cine y juergas copaban cada vez más mi espacio ocioso junto al creciente uso de los compatibles, así que mi querida Snes se convirtió en una guitarra eléctrica y amplificador, que me facilitaron tardes delante del balcón, pitillo en boca y rasgado de acordes lastimeros para escarnio de mis vecinos..."ya está el puto melenas tocando el Follow the Sign"...o intentándolo, supongo pensarían...


La SNES versión yanki, por una vez disfrutamos de la versión guapa en nuestro país.

Y pasó el tiempo...llegaron los emuladores en PC, que me permitieron recuperar títulos impensables por aquellos tiempos, como Chrono Trigger, quizás el top de Snes en cuanto a RPGs y que creo no llegó a tocar tierras españolas o títulos que por entonces no me llamaban pero quería recuperar.

Me salté la exitosa generación PlayStation, pero la recuperé en forma de emulación en PC con el Connectix VGS, lo que me permitió saborerar títulos como Silent Hill o Resident Evil y que se convirtieron en mi género favorito, el Survival Horror....pero eso ya es otra historia.

Títulos destacables serían;

Zelda, S. Mario World, S. Street Fighter II, Castlevania IV, Donkey Kong Country, S. Mario Kart, Secret of Mana, Starwing, Dragon Ball Z II, S. Metroid, Final Fantasy III, Uniracers, Chrono Trigger...bueno de hecho RPGs hay la vida ya que fue probablemente el género estrella, con Secret of Evermore, Terranigma, Ilusion of Time...y hablando de deportivos, un tal International Superstar Soccer, que degeneró en lo que hoy se conoce como Pro Evolution Soccer.
Y me dejo muchos, el catálogo es enorme...


Evidentemente, para el que quiera recuperar algo de esa época, todo tiempo pasado fue mejor, o eso dicen, pero está claro que hay que hacerlo desde el contexto histórico que tocaba, con gráficos que han sido superados ampliamente por cualquier teléfono móvil, juegos que ocupan unos pocos megas en su mayoría y que pueden ser conseguidos ahora en su totalidad del catálogo mediante la emulación en cualquier pc o consola modificada, incluso traducidos por grupos de fans....ya sólo nos queda recordar esos momentos en los que clavábamos el juego en el circuito (porque había que apretar como si acoplases un módulo de RAM), encendías el bicho, cogíamos el mando y disfrutábamos como locos con aquellos monigotes pixelados.

Recordad, no obstante, que a la Luna se llegó con algo muy inferior a una Master System.

 
Súper Castlevania IV OST. Una maravilla.



Un saludo!

31 de octubre de 2011

Up in the Air

El hijo de Ivan Reitman, aquél que sacó Los Cazafantasmas y juntó a Danny de Vito y Swarzenegger, parece que lleva una prometedora carrera con productos como Juno, Gracias por fumar o esta Up in the air. Básicamente no tiene nada más, de momento.

Reconozco que la comedia no es un género que me entusiasme, recurro a él para sesiones en modo crucero y porque en ocasiones son mezcladas con algo de acierto con algún otro género.

Juno me gustó, así que viendo que Up in the Air estaba interpretada por el casi siempre solvente George Clooney y por Vera Farmiga, que me encantó en Código Fuente, me lancé a recuperar esta cinta que tenía apartada desde hace tiempo.




UITA cuenta la historia de Ryan Bingham, interpretado por el bueno de George, un tipo que se dedica a viajar por todo Estados Unidos optimizando los costes de las empresas, es decir, despidiendo a gente y ahorrándole el trago a los mandamases.
Lleva una vida de hoteles, vuelos y coches en lo que podríamos definir como una variante de friki en cuanto al trabajo, pasando por "su casa" dos o tres semanas al año. Y está encantado.

El ritmo inicial, el micro-mundo que presenta y la construcción de personajes son sus verdaderos puntos fuertes. Reitman abofetea al espectador en sus primeros compases presentando de manera sólida y con pulso una historia que poco a poco comienza a beber de sus protagonistas, llegando al punto de presentar al trío central, resultando una química potente, divertida y que convence.

Al uso, podríamos decir que todo se ve venir en cierta manera, pero juega unas cartas interesantes que hace que no apuestes todo durante el viaje, más todavía si has visto Juno o Gracias, en el que el ácido puede que chalpique algo más que en esta, siendo los momentos entre Clooney y Farmiga los más destacables, sin olvidar los momentos despidos, algo así como cuando House pasa consulta, un punto fresco dentro de lo macabro.

 Vas a despedir a Jonah Jameson?!

Factura sobria, elegante y bien llevada, cierta flojera en algún punto, quizás la parte party del barco me sobre aunque tampoco es para lapidarla por eso.

En general muy recomendable.

Un saludo!

28 de octubre de 2011

One

En Hiroshima, salvo que tengas un estómago de acero y mees oro es bastante fácil retorcerse con las distintas historias que te golpean mientras visitas la ciudad. Una de ellas, una, de tantas que vimos reflejadas en las placas informativas en el museo contaba la historia de Sadako Sasaki...

Sadako Sasaki fue una cría que vivió a casi dos kilómetros del centro de Hiroshima en donde la bomba atómica detonó. Pasados nueve años de aquél acontecimiento desarrolló leucemia.

Existe una antigua leyenda japonesa que cuenta que aquél que consiga hacer mil grullas de papel le será concedido un deseo como sanar de una enfermedad o alargar la vida.


Sasaki comenzó la tarea a pesar de estar en un estado avanzado de la enfermedad, pero murió antes de acabar la gesta, terminándola sus compañeros de clase por ella y convirtiendo esta historia en un símbolo de la paz mundial.


Esta quizás sea la más "amable" de las historias, la más universal probablemente, había algunas otras que te jodian vivo nada más leerlas...está claro que vivimos días duros y que muchas veces cuesta levantarse de los reveses que te inflige la vida...pero a mi siempre me gusta decir "podría ser peor", dejar una buena pausa, y seguir con  "mucho peor", como hacía el bueno de Samuel L. Jackson mientras sostenía la mirada y el eterno pitillo...cosas mías.

Más info aquí o aquí.

One, de Metallica.

24 de octubre de 2011

El escritor (The Ghost Writter)

The Ghost Writter está basado en una novela del escritor Robert Harris, que un buen día le comentó a Polanski la posibilidad de portar al cine su obra "el poder de la sombra".

Este es un claro ejemplo de cinta que podría haber caído en cualquier sobremesa de Antena 3 (por decir un canal de televisión) de no ser por la maestría de Roman tras las cámaras y de unos actores que cumplen sobradamente con su rol en la historia.

Un escritor británico obtiene el encargo de escribir las memorias de un ministro británico, pero en el transcurso de su trabajo, encontrará una revelaciones que lo llevarán a un sub-mundo en la política peligroso y lleno de intereses.


Aparentemente, estamos ante un thriller al uso, de esos en los que un baile interminable de nombres, todos ellos muy parecidos para escarnio del espectador, tipo Roy, Frank, Ruth, James, etc..., con mordaces y rápidos diálogos que parecen prediseñados dos meses antes de producirse, tipo "La red social" y con varios giros y situaciones de tensión en las que el personaje parece hundirse poco a poco en una situación que le supera por momentos.

Pero como comentaba, todo quedaría en una más de no ser por Roman Polanski, que ofrece una dirección con un pulso magnífico, que convierte una historia más en un thriller angustioso a camino entre Shutter Island de Scorssese y una novela de Agatha Christie. La fotografía es magnífica, los paisajes no podían estar mejor pensados e integrados en una historia gris, de sombras y de poder.

McGregor, Brosnan y, sobre todo, Olivia Williams están tremendos en sus papeles, resultando convincentes y con algunos momentos de humor ácido que se agradecen a lo largo de la cinta, un humor muy británico en ocasiones, para no olvidar las raíces del proyecto.

El escritor es una magnífica obra, con una base mucho más simple aparentemente que la mayoría de thrillers aunque contando con su misma esencia, cosa que yo agradezco bastante, ya que me suelen cansar bastante las historias hiper-enrevesadas de políticos, a las que por pereza tan sólo me acerco muy de tarde en tarde cuando realmente me apetece un rato de conspiraciones a gran escala.

Cintas recomendables para acompañar a The Ghost Writter serían la comentada Shutter Island aunque con un toque más "sobrenatural"o Con la muerte en los talones de Hitchcock.

Un saludo!

21 de octubre de 2011

Draw Your Swords


Diría que las relaciones no deberían sellarse con candados...



 Draw Your Swords de Angus & Julia Stone

17 de octubre de 2011

Incendies

Denis Villeneuve presenta una cinta que viene precedida de buenas críticas, en mi opinión acertadas algunas y otras no tanto.

Simon y Jeane Marwan se encuentran ante el notario para recibir el testamento de su recientemente fallecida madre, pero lo que recibirán será un par de noticias inesperadas.

Villeneuve nos deja un drama ambientado en unos convulsos años 70 de Palestina en el que los dos hermanos (bueno, más bien la hermana) tendrán que investigar la vida de una madre a la que al parecer no conocían demasiado mientras se suceden flashbacks al pasado en los que acompañaremos a su propia madre en su peculiar odisea.

La cinta tarda, en mi opinión, bastante en arrancar, tiene pasajes que se hacen algo pesados por falta de ritmo y que dejan la sensación de estar algo desaprovechados o alargados en demasía. Hay escenas en las que vemos como se acompaña con la cámara a Jeane con el único enfoque de verla subir una colina, bajar una calle, subir una cuesta, asomarse por aquí, mirar por allá...muy bien, perfecto. Acto seguido asistimos a una escena muy cruda que te deja ko y luego otra vez colina, otra vez caminillo...con lo que parte un poco un esquema poco definido, extraño...deja una sensación agridulce de pérdida de tiempo. Lo peor de todo es que quizás se podía haber aprovechado mucho mejor el entorno, Iñarritu y su Babel son buena muestra de cómo utilizar entornos aparentemente áridos, por poner un ejemplo.
En su defensa se podría decir que con un presupuesto de tan sólo 7 millones lo conseguido es notable.

Otro aspecto negativo, que a su vez es su gran baza, convirtiéndose en un arma de doble filo, es el propio guión. Por un lado es una historia cruda, que retrata fantásticamente bien la vida de su protagonista elemental, pero por otro lado tiene ciertos aspectos digamos "cogidos con pinzas", una vez acabada se entiende. Está claro que por ser posible, lo es, pero hace falta un gran esfuerzo para no caer en cierta desilusión...y es que si la cinta va por derroteros realistas, girar hacia el culebrón no parece lo más sincero.

Probablemente la cinta no busque "entretener", eso está claro, pero repito, que el hecho de no meter más explosiones o situaciones clichés, no implica que no se pueda mostrar mucho más de un ambiente así.

A pesar de estos aspectos, Incendies es una muy disfrutable cinta, cruda por momentos y con un mensaje interior interesante y reflexivo sobre al eterno conflicto por el "trozo de tierra".

Un saludo!