Me encantan las pelis post-apocalípticas, y cuando hay plagas y zombis de por medio ya ni digamos. En muchas ocasiones me ha hecho tragarme truños bastante grandes pero siempre consigo encontrarles algún punto interesante o que me mantengan entretenido...
Últimamente parece que el género se está dividiendo entre la vertiente de la pura acción y las que intentan ahondar en la psicología de los personajes...puede que por el agotamiento del género o por otros motivos, el caso es que siguen apareciendo cada X tiempo pelis de zombis y siguen atrayendo al público, qué tendran estos seres putrefactos que tanto llaman la atención?
En el caso de Infectados (dirigida por dos hermanos españoles, Àlex Pastor y David Pastor) tenemos la vertiente más psicológica que de acción (que sería el caso de pelis tipo Resident Evil)...otras cintas como las de 28 días/meses después que cuentan con una mezcla entre la acción y el desarrollo de personajes (más en su primera parte).
Esta nos sitúa en plan road-movie en un futuro en el que una plaga ha infectado a la mayoría de la población mundial y un grupo de cuatro chicos se dirigen a un lugar para ponerse a salvo e intentar sobrevivir.
Con mayor o menor acierto, estas pelis sitúan a los personajes ante situaciones límite, quizás este sea uno de los puntos flacos de esta cinta, y es que ya hemos visto más de una vez las situaciones a las que se enfrentan...al típico sustillo fácil y al niñato que se arriesga haciendo el mongo innecesariamente y tú dices "no te acerques caraculo que la vas a palmar...que se ve venir..."
El título intenta mostrarnos como una mini-sociedad de cuatro personajes han creado unas reglas con las que al parecer sobreviven...reglas que intentarán mantener en un mundo hostil y lleno de peligros, externos e internos.
No hace mucho leí el libro de la guía Zombi de Max Brooks, una frikada de veinte pares pero que recomiendo a los que disfruten como yo del mundillo Z. En ella te cuentan todo tipo de triquiñuelas y consejos para sobrevivir a una invasión zombie (ya sea mundial, local, marítima o qué se yo...). Huelga decir que mientras veía la peli cada dos minutos veía un fallo (me estoy emparanoiando), esto quizás me ha alertado en demasía algunos fallos que quizás otros pasarán por alto...en cualquier caso la cinta es entretenida y te mantiene durante su corta duración (poco menos de hora y media) atento a lo que vendrá.
Un saludo!
30 de noviembre de 2009
23 de noviembre de 2009
Malditos Bastardos
Fabulosa.
Tarantino nos presenta una historia fictícia en la que un grupo de soldados judíos americanos se toman la guerra contra los nazis por su cuenta, con muy malas pulgas y sin las típicas reglas en cuanto a digamos, saber estar o no llamar la atención.
La historia llama la atención nada más oirla, pero claro, sabiendo que detrás del proyecto se encuentra Quentin Tarantino y que le acompaña un Brad Pitt más cabronazo que nunca uno no puede más que frotarse las manos y rezar por que no quede todo en saco roto, y no queda.
Inglorious Basterds es plástica, desde sus brutales comienzos pasando por escenas de puro pulso cinematográfico hasta la más desenfrenada casquería y momentos de locura.
Y es que si en algo se caracterizan las historias de Tarantino es en que todo puede pasar antes, durante y después de los diálogos entre sus personajes, como en ese estupendo comienzo en la granja de LaPadite, con una conversación tensa, fantástica en cuanto a contenido y todo un ejercicio de psicología que consigue que llegado a un punto el espectador titubee como lo hace su mismo protagonista.
Cierto es que la peli pierde algo de fuelle durante su mitad, y pasan unos momentos en los que la grandísima espectación generada durante su comienzo hace que tengamos el listón demasiado alto, pero una vez acabada uno aprecia cada momento y cada pieza que se coloca en la historia para que podamos ver ese final enfermizo pero con tantísima clase a la vez.
Mención especial a Christoph Waltz como coronel Landa, cada vez que aparece consigue que mantengamos la respiración, es el puto Poirot nazi por excelencia y desde ya todo un clásico en cuanto a interpretación.
También destacar la banda sonora (bueno, como casi siempre me he encontrado en las pelis de Tarantino), fantástica, con un Morricone inspiradísimo y bueno, algunas escenas bellísimas adornadas con esos toques a lo espaguetti western que tanto me gustan.
Realmente cuesta encontrarle algo malo a la cinta, quizás lo comentado anteriormente de su hemisferio (algunos lo sentirán más que otros) y, por ponerse quisquillosos, el doblaje...se nota que es una peli para ver si es posible en versión original, dado los distintos acentos y el juego de palabras que utilizan en muchas ocasiones (por no decir la escena de los "italianos", tremenda)....de todas formas es de esas que estás deseando volver a ver para sacarle más jugo todavía, ya que es prácticamente imposible caer en todos y cada uno de los meticulosos detalles que tiene esta, para mí, obra maestra.
Muy recomendable, un saludo!
Tarantino nos presenta una historia fictícia en la que un grupo de soldados judíos americanos se toman la guerra contra los nazis por su cuenta, con muy malas pulgas y sin las típicas reglas en cuanto a digamos, saber estar o no llamar la atención.
La historia llama la atención nada más oirla, pero claro, sabiendo que detrás del proyecto se encuentra Quentin Tarantino y que le acompaña un Brad Pitt más cabronazo que nunca uno no puede más que frotarse las manos y rezar por que no quede todo en saco roto, y no queda.
Inglorious Basterds es plástica, desde sus brutales comienzos pasando por escenas de puro pulso cinematográfico hasta la más desenfrenada casquería y momentos de locura.
Y es que si en algo se caracterizan las historias de Tarantino es en que todo puede pasar antes, durante y después de los diálogos entre sus personajes, como en ese estupendo comienzo en la granja de LaPadite, con una conversación tensa, fantástica en cuanto a contenido y todo un ejercicio de psicología que consigue que llegado a un punto el espectador titubee como lo hace su mismo protagonista.
Cierto es que la peli pierde algo de fuelle durante su mitad, y pasan unos momentos en los que la grandísima espectación generada durante su comienzo hace que tengamos el listón demasiado alto, pero una vez acabada uno aprecia cada momento y cada pieza que se coloca en la historia para que podamos ver ese final enfermizo pero con tantísima clase a la vez.
Mención especial a Christoph Waltz como coronel Landa, cada vez que aparece consigue que mantengamos la respiración, es el puto Poirot nazi por excelencia y desde ya todo un clásico en cuanto a interpretación.
También destacar la banda sonora (bueno, como casi siempre me he encontrado en las pelis de Tarantino), fantástica, con un Morricone inspiradísimo y bueno, algunas escenas bellísimas adornadas con esos toques a lo espaguetti western que tanto me gustan.
Realmente cuesta encontrarle algo malo a la cinta, quizás lo comentado anteriormente de su hemisferio (algunos lo sentirán más que otros) y, por ponerse quisquillosos, el doblaje...se nota que es una peli para ver si es posible en versión original, dado los distintos acentos y el juego de palabras que utilizan en muchas ocasiones (por no decir la escena de los "italianos", tremenda)....de todas formas es de esas que estás deseando volver a ver para sacarle más jugo todavía, ya que es prácticamente imposible caer en todos y cada uno de los meticulosos detalles que tiene esta, para mí, obra maestra.
Muy recomendable, un saludo!
16 de noviembre de 2009
Alien el octavo pasajero
Poco antes de nacer el que aquí escribe se estrenaba en los cines "otra" peli del espacio en la que aparentemente un extraterrestre la liaba en una nave...no era la primera que nos planteaba la situación de enfrentarnos a algo que escapaba a lo conocido por el ser humano, pero nunca antes se había mostrado algo semejante y que marcase tantísimo a una generación.
Ridley Scott nos situaba en un futuro en el que los paseos por el espacio se realizan para trabajar (la nave Nostromo es básicamente un camión de mercancías) o para descubrir nuevos sistemas. Sin detenerse en cómo ha llegado la humanidad a conseguir dicha tecnología nos encontramos con una tripulación que es despertada de su sueño espacial para socorrer una presunta señal de socorro de un planeta inexplorado.
Imágenes que quedarán grabadas para siempre como leyendas del cine completarán a partir de aquí una de las cintas más terroríficas de la historia...con momentos como el despertar de la tripulación, el paseo por el planeta 426, el encuentro con la nave alienigena...o "la última cena"...sin olvidar el fantástico diseño que ideó HR Giger para mostrarnos a ese Alien que apenas aparecía (por las limitaciones en fx de la época) pero que conseguía acojonarnos en cada minuto.
Sigourney Weaver era por entonces una desconocida que por cosas del destino acabaría convirtiéndose en toda una heroína para los que crecimos con esta y sobre todo, con su impresionante segunda parte.
Durante casi dos horas, la película te mantiene totalmente pegado al asiento, posee un pulso que todavía hoy 30 años más tarde sigue siendo magistral...tan sólo ciertos aspectos chirrían con el paso del tiempo, memeces como la ropa, pantallas de ordenador y demás...aunque por otro lado, este último aspecto le da un aire de verdadera utilidad a la tecnología...es una nave tosca, rudimentaria...ensamblada para aguantar. De todos modos, para nada empañan el resultado global, una cinta de momento inmortal y muy recomendada que conviene recuperar en ocasiones del "olvido".
Por cierto, que parece que se prepara la precuela de esta misma parte, y dirigida parece ser por Ridley Scott de nuevo. En esta nueva entrega se nos explicaría el orígen de, precisamente, la nave que encuentra la tripulación de la Nostromo...esperemos que le devuelva a la saga el prestigio perdido con las últimas entregas.
Un saludo!.
Ridley Scott nos situaba en un futuro en el que los paseos por el espacio se realizan para trabajar (la nave Nostromo es básicamente un camión de mercancías) o para descubrir nuevos sistemas. Sin detenerse en cómo ha llegado la humanidad a conseguir dicha tecnología nos encontramos con una tripulación que es despertada de su sueño espacial para socorrer una presunta señal de socorro de un planeta inexplorado.
Imágenes que quedarán grabadas para siempre como leyendas del cine completarán a partir de aquí una de las cintas más terroríficas de la historia...con momentos como el despertar de la tripulación, el paseo por el planeta 426, el encuentro con la nave alienigena...o "la última cena"...sin olvidar el fantástico diseño que ideó HR Giger para mostrarnos a ese Alien que apenas aparecía (por las limitaciones en fx de la época) pero que conseguía acojonarnos en cada minuto.
Sigourney Weaver era por entonces una desconocida que por cosas del destino acabaría convirtiéndose en toda una heroína para los que crecimos con esta y sobre todo, con su impresionante segunda parte.
Durante casi dos horas, la película te mantiene totalmente pegado al asiento, posee un pulso que todavía hoy 30 años más tarde sigue siendo magistral...tan sólo ciertos aspectos chirrían con el paso del tiempo, memeces como la ropa, pantallas de ordenador y demás...aunque por otro lado, este último aspecto le da un aire de verdadera utilidad a la tecnología...es una nave tosca, rudimentaria...ensamblada para aguantar. De todos modos, para nada empañan el resultado global, una cinta de momento inmortal y muy recomendada que conviene recuperar en ocasiones del "olvido".
Por cierto, que parece que se prepara la precuela de esta misma parte, y dirigida parece ser por Ridley Scott de nuevo. En esta nueva entrega se nos explicaría el orígen de, precisamente, la nave que encuentra la tripulación de la Nostromo...esperemos que le devuelva a la saga el prestigio perdido con las últimas entregas.
Un saludo!.
2 de noviembre de 2009
"Pequeños" diablos
Hace unas semanas vi la cinta de Christian Alvart "Expediente 39", como no me llamó excesivamente la atención no pensaba comentarla, pero esta semana he vuelto a ver otra de temática parecida y me ha parecido buena idea compararlas para sacar algo positivo y no pensar demasiado en esas casi 4 horas "perdidas".
Expediente 39 nos cuenta la historia de una trabajadora social que se encarga de investigar supuestos malos tratos de padres hacia sus hijos, un caso en especial le llamará la atención...
La huérfana (de Jaume Collet-Serra, el que nos divirtió atravesando a Paris Hilton en la casa de cera) trata sobre una familia que perdió su tercer hijo en el momento del parto, esto crea un daño psicológico a la pareja (acentuado por algún que otro problema) que provocará la necesidad de adoptar a alguien necesitado...
Mientras la primera nos sitúa en un caso con más carga social con tintes sobrenaturales, la segunda nos pone en una pesadilla más terrenal, más cerca del thriller en ocasiones que de una cinta de terror.
Ambas utilizan la inocente apariencia de frágiles niñas para meternos de lleno en su propuesta de pesadilla, acertando en ocasiones una y fallando en otras.
La primera comienza bien, pero poco a poco se convierte en otra cinta típica de sustos y muertes programadas con un par de sorpresas que se mascan desde casi el comienzo...la segunda en cambio consigue mantenernos interesados y crea poco a poco un clímax más conseguido, jugando con el espectador de manera más "real" aunque con ciertos aspectos de guión cogidos un poco con pinzas y algún que otro tópico ya muy visto...
En cualquier caso, entretienen y sirven para pasar el rato, sin grandes pretensiones.
Un saludo!
Expediente 39 nos cuenta la historia de una trabajadora social que se encarga de investigar supuestos malos tratos de padres hacia sus hijos, un caso en especial le llamará la atención...
La huérfana (de Jaume Collet-Serra, el que nos divirtió atravesando a Paris Hilton en la casa de cera) trata sobre una familia que perdió su tercer hijo en el momento del parto, esto crea un daño psicológico a la pareja (acentuado por algún que otro problema) que provocará la necesidad de adoptar a alguien necesitado...
Mientras la primera nos sitúa en un caso con más carga social con tintes sobrenaturales, la segunda nos pone en una pesadilla más terrenal, más cerca del thriller en ocasiones que de una cinta de terror.
Ambas utilizan la inocente apariencia de frágiles niñas para meternos de lleno en su propuesta de pesadilla, acertando en ocasiones una y fallando en otras.
La primera comienza bien, pero poco a poco se convierte en otra cinta típica de sustos y muertes programadas con un par de sorpresas que se mascan desde casi el comienzo...la segunda en cambio consigue mantenernos interesados y crea poco a poco un clímax más conseguido, jugando con el espectador de manera más "real" aunque con ciertos aspectos de guión cogidos un poco con pinzas y algún que otro tópico ya muy visto...
En cualquier caso, entretienen y sirven para pasar el rato, sin grandes pretensiones.
Un saludo!
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