El laberinto del Fauno

Guillermo del Toro continúa con su peculiar forma de mostrarnos sus fantasías y sueños de infancia.

Siguiendo la estela del Espinazo del Diablo nos presenta el Laberinto del Fauno, una cinta donde poco laberinto veremos, pero en cambio asistiremos a una cruda historia donde la infancia es la que peor parada sale de la cruda realidad a la que tiene que enfrentarse.

La historia gira en torno a Ofelia, una niña de 13 años que acompaña a su madre embarazada a un campamento donde su padrastro, un capitán franquista llamado Vidal, hace frente a los últimos reductos de resistencia republicana que quedan parapetados en los bosques...
Allí, Ofelia verá el horror fascista en su pleno apogeo, pero gracias a su imaginación, encontrará cerca a Fauno, un ser de fantasía que le contará una historia que cambiará el destino de Ofelia para siempre...y lo dejamos ahí que veo que me ha quedao bien...el resto mejor verlo que merece la pena.

La película a mi personalmente me ha encantado, su crudeza me ha llegado, y su estilo visual me ha parecido tremendo.
Seguimos con la puta manía que tienen los actores españoles de hablar susurrando pero aquí tiene algo más de sentido debido a la opresión reinante...aun así a veces llega a exasperar...menos mal que las interpretaciones son todas bastante acertadas, sobre todo la de Videl, Mercedes (la Verdú) y Ofelia, que consiguen transmitir perfectamente cada situación.

Por cierto que la película tiene altas dosis de vísceras y ketchup, cosa a la que Guillermo sigue sin renunciar desde que en Cronos le diera un ataque de casquería y martirizara al pobre Luppi.

Un saludo!